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viernes, 28 de febrero de 2014

La automedicación

La automedicación:



















La auto medicación es la medicación sin consejo médico. Crea diversos problemas si no se tienen suficientes conocimientos. La automedicación en un hábito común en nuestra sociedad.
Algunos problemas son:

  • Toxicidad: efectos secundarios, reacciones adversas y en algún caso intoxicación.
  • Falta de efectividad, porque se utilizan en situaciones no indicadas. Por ejemplo, la toma de antibióticos para tratar procesos víricos contra los cuales estos medicamentos no son efectivos.
  • Dependencia o adicción.
  • Enmascaramiento de procesos clínicos graves y consecuentemente retraso en el diagnóstico y tratamiento.
  • Interacciones con otros medicamentos o alimentos que la persona esté tomando. Puede haber una potenciación o una disminución del efecto del medicamento.
  • Resistencias a los antibióticos. El uso excesivo de antibióticos puede hacer que los microorganismos desarrollen mecanismos de defensa delante de estos medicamentos de manera que dejan de ser eficaces.

En las farmacias se pueden dispensar algunos 
medicamentos sin necesidad de una receta. Por eso se les llama medicamentos sin receta o medicamentos OTC. Se puede tomar en cuenta que en la actualidad los casos que se presentan por reacciones adversas a medicamentos es por aquellos que no fueron suministrados por sus médicos, es decir fueron auto medicados; los medicamentos solo se deben dispensar en la farmacia bajo receta médica, excepto en algunos casos, donde el farmacéutico puede recomendar un medicamento el cual debe ser de venta libre (OTC), Puede ser beneficioso si se utiliza para tratar problemas leves, por ejemplo: resfriado común, dolor leve, etc.
Aun así, que un medicamento sea una EFP y que se dispense sin receta no quiere decir que sea inocuo y no pueda resultar perjudicial en determinadas situaciones ya que no deja de ser un medicamento.
Por este motivo en caso de cualquier duda se debe consultar al médico o farmacéutico.
Otro caso distinto y muy frecuente de automedicación seria,  la automedicación con medicamentos que no son EFP y que tienen que ser prescritos por un médico. Esta es una práctica desaconsejada.
Un ejemplo sería la toma de antibióticos sin prescripción médica ante la sospecha de una infección. Los antibióticos no se deben tomar nunca por propia iniciativa sin la supervisión de un médico.
Los medicamentos más usados en automedicación son:

Analgésicos:
Las cifras disponibles sobre el consumo de estos medicamentos nos indican una exposición masiva de la sociedad a los analgésicos en todos los grupos de edad y para una amplia muestra enfermedades.
Cuando se abusa de estos fármacos o se utilizan de forma indiscriminada sin control por un profesional pueden ocasionar efectos adversos graves relacionados con el aparato digestivo o riñón.



                                                                                           Antibióticos:
Los antibióticos son solicitados por los propios pacientes en la consulta, incluso a pesar de un diagnóstico médico infeccioso que no precisa de su uso.
Otros reutilizan un envase previo guardado en el botiquín casero o van directamente a la farmacia, piden una marca conocida y se la auto administran ellos o a sus hijos.
Asimismo, según un estudio europeo comparativo reciente, España se encuentra entre los países con mayor grado de automedicación con antibióticos y de acopio de los mismos en el hogar de Europa.
En relación a ello, España muestra registros muy desfavorables de resistencia a antibióticos, especialmente en patógenos bacterianos de ámbito extra hospitalario.
Por todo ello el Ministerio de Sanidad y Consumo inició la campaña en el año 2006 “Uso responsable de Antibióticos. Usándolos bien hoy, mañana nos protegerán.”, con la colaboración de médicos, odontólogos, farmacéuticos y enfermeras.


Especialmente mujeres embarazadas, niños y ancianos pueden sufrir algún daño si deciden por iniciativa propia tomar cualquier tipo de medicamentos, incluso aspirinas o vitaminas.

Trabajo realizado por Diego Jiemeno de la Calle, 1ºC BACH.

Webgrafía:


Libro de CMC.







3 comentarios:

  1. Me parece muy importante destacar que la toma de medicamentos tiene que estar bajo la supervisión y control de un especialista, como puede ser un médico o un farmacéutico dado que el abuso, o el uso inadecuado de los medicamentos puede llegar a tener graves consecuencias en la salud del sujeto que toma los medicamentos.
    Muchas personas toman mayor dosis de la recomendada cuando percibe que no la hace efecto la recomendada y lo único que está haciendo es perjudicar gravemente su salud.
    Carmen Casado Tovar 1ºC Bach. Nº5
    Aquí te dejo el enlace de nuestro blog por si te apetece pasarte.
    http://ladrogadiccion-cmc.blogspot.com.es/

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  2. El consumo de medicamentos por iniciativa propia para paliar enfermedades graves me parece algo muy peligroso, pues no siempre conocemos bien nuestro organismo y no sabemos las consecuencias que esto puede conllevar. Por eso creo que antes de ingerir ningún tipo de medicamento debemos acudir al médico y seguir las pautas que nos recomiende.

    Una entrada muy interesante, un saludo
    Beatriz Albertos Ramos 1ºC Nº1

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  3. Como todos sabemos, el tema que has tratado en la entrada es totalmente actual, cada vez tomamos más medicamentos y los tomamos como si fuesen caramelos, y no, no me voy a excluir de ese tipo de personas. Siendo una propia "pecadora" de este hecho, creo que hemos concebido a medicamentos como el paracetamol o el ibuprofeno para el dolor de tripa o cabeza, como los caramelos de menta para el mal aliento, quiero decir, los consideramos débiles, una patraña, pero sí, obviamente nos alivian el dolor. De este modo, pienso que el problema reside en esto, en el no tomarnos en serio el consumo de medicamentos con el prejuicio de "inofensivos", cuando en realidad son un plus innecesario de sustancias químicas que a la larga afectan al organismo; como dicen "nada en exceso es bueno".
    Buena y curiosa entrada; pásate por nuestro blog desastrebienorganizado.blogspot.com
    Helena Postigo Matey 1ºC Nº24

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